WASHINGTON.- En una carta fechada el 15 de diciembre,
el gobernador de Puerto Rico, Ricardo Rosselló, imploró
desesperadamente a los miembros del Congreso que usaran la última semana
legislativa de este año como “la oportunidad” para aprobar el paquete
de fondos suplementarios de emergencia para reconstruir la isla,
devastada por los huracanes Irma y María.
“La última
esperanza de nuestra isla y comunidad está enteramente en sus manos”
especificó en la misiva el gobernante. También señaló que, si bien
Puerto Rico agradece los fondos que el Congreso ha dado con los
suplementos preventivos, “ninguno de esos recursos fue otorgado para
apoyar los esfuerzos de recuperación”.
En su carta, el funcionario recordó a los congresistas que
3,4 millones de ciudadanos estadounidenses en Puerto Rico fueron
aporreados por dos de los más poderosos huracanes en la historia del
país, que sobrepasaron los niveles de destrucción conocidos. Tras
resaltar la "resiliencia y paciencia de los pobladores”, Rosselló
aseguró que la isla necesita la ayuda del Congreso para una recuperación
completa.
El 15 de diciembre anterior se cumplió el
plazo que se puso el gobierno de la isla para generar energía al 95 por
ciento de su capacidad. Pero no cumplió, y en su lugar dio como único
consuelo a los ciudadanos la posibilidad de que el sistema se
restablezca en algún momento, sin una fecha concreta.
Con nueve municipios totalmente a oscuras y con
la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) generando potencia a tan solo 64 por ciento de su capacidad, Rosselló pidió al Congreso
algo más de 63,000 millones de dólares,
de los cuales 46.000 millones serían para apoyar la reconstrucción de
casas, activar los planes de recuperación del turismo y preparar mejor
al territorio ante posibles embates de otros fenómenos naturales.
Además, le demandó al Congreso la aprobación de otros 11,350
millones de dólares para reconstruir el servicio de Salud, 2,200
millones para los programas del Departamento de Agricultura, 2,000
millones para los programas del Ministerio de Transporte y 1,800
millones para los programas de ingeniería de los cuerpos de la Armada,
que pidieron fondos para instalar
50,000 nuevos postes de luz, para que el servicio de electricidad regrese a la normalidad.
“Como
gobernador soy consciente de que estos fondos son muy altos”, reconoció
Rosselló. Ssin embargo, insistió en la premura de su solicitud: “A no
ser que el Congreso actúe con vigorosidad antes de que acabe este año,
habremos perdido una oportunidad crítica para mostrar a Puerto Rico,
Estados Unidos, y el mundo entero que somos una nación que se cuida a sí
misma”.
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