martes, 16 de abril de 2019

¿Perdonará Trump a Julian Assange? / Guillermo Herrera *

La detención de Julián Assange no es más que un pequeño acto de venganza por parte del Estado Profundo, según el portal ‘Infowars’ de Alex Jones, el mismo Estado Profundo que ha estado en guerra contra Donald Trump, pero esta detención también se puede volver en contra del Estado Profundo por toda la información acusatoria que tiene. Assange expuso crímenes de guerra cometidos por orden de belicistas neo-conservadores. Fueron los crímenes de guerra los que dañaron la reputación de Estados Unidos, no Wikileaks.

Según su abogado, Julián Assange fue arrestado por una solicitud de extradición de los Estados Unidos, lo que reduce las posibilidades de que reciba un indulto presidencial. Pero en 2016, Trump dijo literalmente: “me encanta Wikileaks.” Entonces, ¿por qué Julián Assange se enfrenta ahora a la posibilidad de desaparecer en un agujero negro, para nunca volver a ser escuchado? Hay que averiguar si el Presidente está de acuerdo con su base de votantes, o con el Estado Profundo que ha estado tratando de subvertir su Presidencia durante los últimos dos años.

Los cargos contra Assange fueron criticados inmediatamente por los defensores de la libertad de expresión, que alegan que Assange simplemente estaba haciendo su trabajo como periodista, al exponer los secretos del Gobierno, y publicar correos electrónicos de la campaña de Clinton, que la llevaron a su fracaso político, y al triunfo del candidato Trump.

Además, antes de que se completara el informe del Fiscal Mueller, Assange también ofreció evidencia de primera mano, a la representante de California, Dana Rohrabacher, que probaba que no hubo interferencia rusa en la campaña electoral de Trump.

¿INDIFERENCIA DE TRUMP?
¿Por qué es tan inexplicable la falta de respuesta de Trump en Julián Assange? “No sé nada de WikiLeaks; no es lo mío dijo Trump a los periodistas el pasado el jueves. La respuesta de Trump ha sido desviar, desviar y desviar, es decir, tirar balones fuera.

Sin embargo, Trump mencionó WikiLeaks más de cien veces en el último mes de su campaña de 2016. Muchas de esas veces, expresó admiración por el trabajo del grupo anti-secreto. “Este material de WikiLeaks es increíble,” dijo una vez. “Chico, me encanta leer esos WikiLeaks,” dijo en otra ocasión. Otra vez más: “Oh, nos encanta WikiLeaks. Chico, realmente WikiLeaks ha revelado mucho.”

Por lo tanto, el “no sé nada de WikiLeaks es falso evidentemente. La decisión de Trump de minimizar su pasado abrazo de WikiLeaks no es una sorpresa. De hecho, siempre que alguien a su alrededor se mete en problemas, tienden a minimizar su proximidad a él, sin importar cuán inverosímil sea. Los asesores de política exterior se convierten en “hombres de café”. Los presidentes de campaña que dirigieron el corazón de su campaña de 2016 se convierten en personas que “desempeñaron un papel muy limitado durante un tiempo muy limitado.”

Pero, sin lugar a dudas, Trump hizo de WikiLeaks una característica destacada de su discurso básico en los últimos días de su campaña de 2016, abrazando sus revelaciones y argumentando que estaba realizando un servicio importante. Los medios de comunicación especularon con estas revelaciones, también, pero Trump fue un paso más allá al elogiar realmente a WikiLeaks.

ASTUCIA
Está claro que Julián Assange tiene información muy valiosa para descubrir y castigar los crímenes del Estado Profundo, pero también está claro que Donald Trump es un zorro muy astuto, un jugador de póquer que nunca enseña sus cartas, y mucho menos manifiesta sus simpatías o antipatías; más bien las disfraza para despistar, como cuando prodigó grandes elogios a Nancy Pelosi, su mayor enemiga. Si recibes elogios de Trump, es mejor que te guardes la espalda.

Además el Presidente Trump no quiere enfrentarse con el poder judicial que pidió la extradición de Assange. Más bien está esperando su oportunidad para salvarle el pellejo a Julián Assange, como por ejemplo, ofrecer su indulto presidencial, a cambio de colaborar con la Justicia, para delatar a los responsables de los crímenes cometidos por el Estado Profundo.

ECUADOR, ‘HAKEADO’
Dos días después de la detención del jueves de Julián Assange, la Embajada de Ecuador en Londres y varios sitios web del gobierno ecuatoriano fueron ‘hackeados’; incluyendo el sitio web del Ecuador oficial, el Banco Central del Ecuador, el Ministerio del Interior y de la Asamblea de Ecuador en el Reino Unido. 

Paralelamente a la violación, un grupo de ‘hacking’ lanzó una base de datos que contiene los nombres completos y las contraseñas de 728 empleados del gobierno ecuatoriano. Además, los sitios de Ecuador se vieron afectados por ataques de Denegación de Servicio.

El grupo internacional de piratas informáticos ‘Anonymous’ advirtió a EE.UU. y Reino Unido de la revolución que se avecina con esta frase: “Liberen a Assange o lo pagarán”. Anonymous afirma que los captores del activista y sus cohortes están a punto de experimentar la fuerza de Internet por la detención del fundador de WikiLeaks.

El movimiento de activistas informáticos ‘Anonymous’ ha publicado un mensaje “para el Gobierno de Reino Unido y sus cohortes” en el que advierte de una “revolución generalizada” en camino provocada por el arresto del fundador de WikiLeaks, Julián Assange, así como por otras acciones de los gobiernos occidentales que “trabajan para silenciar” a los que revelan sus más sucios secretos.

Desde la CIA y el presidente de EE.UU. hasta los oficiales que sacaron a Assange de la Embajada de Ecuador para su arresto, se han expuesto a sí mismos como enemigos del pueblo, y es hora de que Anonymous actúe en consecuencia,” señaló el grupo de activistas.

Anonymous menciona que esas fuerzas occidentales han actuado en contra de su propia gente “sin temor” porque creen que sus posiciones de poder les otorgarán “protección contra las consecuencias kármicas de la realidad.” 

Sin embargo, el grupo asegura que esto está por cambiar.


 (*) Periodista español

No hay comentarios:

Publicar un comentario